ELIGE LA RUTA Y NÚMERO DE PASAJEROS
¿PORQUE RESERVAR SU TRASLADO CON TRANSFERBUS?
El Aeropuerto de Gerona, oficialmente Aeropuerto de Girona-Costa Brava, es un aeropuerto español de Aena que está ubicado a 13 kilómetros de la ciudad de Gerona, dando servicio a toda la Costa Brava, y a 100 kilómetros de la ciudad de Barcelona. En la actualidad es uno de los aeropuertos que más crecimiento ha experimentado en los últimos años, debido fundamentalmente al hecho de ser una de las principales bases de la compañía Ryanair en Europa. En 2009 movió 5.510.970 pasajeros, gestionó 49.927 operaciones y 184 toneladas de carga. Lo que lo llevó a ser el 9º aeropuerto español por número de pasajeros.
Cómo llegar al aeropuerto
Siendo una alternativa al Aeropuerto de Barcelona, el Aeropuerto de Gerona sirve a los resorts de la turística Costa Brava, como son Lloret de Mar, Estartit o Playa de Aro, entre otros. Además de a la propia área urbana de la ciudad de Gerona. A tan sólo 40 minutos en coche de la frontera francesa, muchos lo utilizan para llegar a los Pirineos y los resorts del esquí de Andorra.
Automóvil
El aeropuerto está servido mediante tres vías principales:
E-15/AP-7 autopista (Perpiñán - Sur de España)
C-25 (Lérida-Vich- Gerona)
N-II, autovía (Madrid - Barcelona - Perpiñán)
Cadaqués es el pueblo más oriental de la península ibérica. Su término municipal ocupa la mayor parte de la costa de levante del macizo del cabo de Creus. Aislado por la montaña del Puig de Paní y el Puig de Bufadors del resto del Ampurdán, el pueblo pesquero de Cadaqués vivió de cara al mar y prácticamente separado, por tierra, del resto del Ampurdán, hasta finales del siglo XIX. Historia El origen del topónimo es "Cap de Quers" o "Cap d'Aques"1 que se traduce por 'Cabo de rocas'. Tradicionalmente dedicado a la pesca, se conocen Ordenanzas de pesca2 propias de Cadaqués desde el siglo XVI. En el siglo XIX fueron famosas las industrias de salazones que, aunque hoy en día no tiene la importancia que tuvieron en el pasado, suponen una parte de la economía local no dedicada al turismo, destacando entre sus productos las Anchoas de Cadaqués. El prolongado aislamiento del pueblo hizo que el catalán que allí se habla, aunque con las particularidades típicas de la zona, sea un caso único de diferenciación, con libros publicados expresamente para tratar esta peculiar habla.3 4 También este aislamiento se convirtió en un factor de atracción para artistas y turistas. A principios del siglo XX comenzaron a llegar turistas que se fueron diseminando entre las diferentes zonas de más fácil acceso, mientras ignoraban sus parajes más recónditos y, como consecuencia, conservaron la virginidad urbanística. El cultivo de los olivos se abandonó con la helada de 1956, pero hoy en día múltiples olivares están siendo recuperados como parte de una economía sostenible, en el ámbito del Parque Natural del Cabo de Creus (que ocupa una parte importante del municipio) y como elemento de lucha contra los incendios, endémicos en esa zona. Varias familias de Barcelona, Figueras, Gerona y otras ciudades cercanas veranean en Cadaqués desde hace muchos años, a partir del 1905. A partir de 1958, Marcel Duchamp, el artista probablemente más influyente del siglo XX, fijó en Cadaqués su residencia veraniega. El pintor surrealista Salvador Dalí, cuya familia tenía en el pueblo la residencia veraniega, donde había estado de visita en su época de estudiante Federico García Lorca, volvió de Nueva York en 1948 y se instaló en Port Lligat una de las calas del término. También atrajo Cadaqués a celebridades tan destacadas como Eugenio D'Ors que escribió sobre sus estancias veraniegas5 en el pueblo, Pablo Picasso, Marcel Duchamp, Joan Miró, Richard Hamilton, Albert Ràfols-Casamada. Cadaqués ha atraído a muchos otros pintores cuya lista sería muy extensa, como Antoni Pitxot, Rafael Durancamps, Gustavo Carbó Berthold, Maurice Boitel, Mauricio Sbarbaro o Joan-Josep Tharrats.